¿Sin efectos inflacionarios?, el aumento al salario mínimo

En festejos navideños las piñatas ya no aparecen, por falta de dinero

 “No quiero oro ni quiero plata, yo lo que quiero es romper la piñata” es, sin duda, una frase que se acomoda muy bien para describir el júbilo con que tal vez la mayoría de las familias mexicanas se expresaron al recibir la noticia de un incremento salarial a partir de enero próximo, y es que, la verdad, en estos tiempos ya ni para la canasta de productos básicos alcanza al grueso de la población y ni se diga de la famosa piñata, en pocos hogares hace presencia pues apenas hay para festejar la navidad.

A partir del primer día del año que estamos a punto de recibir, el salario mínimo tendrá un aumento del 12%, así lo anunció la semana pasada la presidenta Claudia Sheinbaum. Explicó que tras un buen acuerdo con el sector obrero y empresarial, el salario mínimo para el 2025 tendrá un incremento de 12 por ciento en todo el país, ya que aumentará de 248.93 a 278.80 pesos diarios en la Zona del Salario Mínimo General y en la Zona Libre de la Frontera Norte pasará de 374.89 a 419.88 pesos diarios, con lo cual se avanza en el objetivo de que cada trabajador pueda acceder a 2.5 veces la canasta básica para el 2030.

“Eso significa que el próximo año el salario mínimo mensual, pasando, multiplicándolo por 30 días promedio, al mes es 8 mil 364; pasa de 7 mil 467 a 8 mil 364, y en la frontera a 12 mil 596 pesos. Es más de tres veces lo que tenemos estimado para la inflación el próximo año”, detalló la mandataria durante una de sus conferencias matutinas.

Habrá quien diga que, aun con el aumento salarial referido, esa cantidad sigue siendo insuficiente para cubrir las necesidades básicas de una familia, lo cual seguramente sea cierto, pero también es verdad que con el aumento salarial previsto para 2025 la brecha de la pobreza sigue a la baja y, lo mejor, al parecer esa tendencia de reducción se está dando sin efectos inflacionarios para los bolsillos de los trabajadores.

LAS CARTAS HABLAN.- Durante el anuncio del aumento salarial para el año próximo se registraron algunas citas que valen la pena destacar:

El secretario del Trabajo y Previsión Social, Marath Bolaños López, destacó que: “Durante estos seis años de la política laboral del Segundo Piso de la Transformación se mantendrá esta decisión, por instrucciones de la Presidenta Claudia Sheinbaum, de seguir mejorando las condiciones de vida de las y los mexicanos”.

El presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Francisco Cervantes Díaz, señaló que México ha iniciado una nueva era de desarrollo caracterizada por impulsar la Prosperidad Compartida, que tiene por objetivo reducir la pobreza laboral.

El vocero del sector obrero de la Conasami (Comisión Nacional de Salarios Mínimos), José Luis Carazo Preciado, celebró que México vive una “primavera laboral”, gracias a que con este incremento al salario mínimo a dos meses de que la Jefa del Ejecutivo Federal asumió el cargo, son muestra de que se continúa apoyando a las y los trabajadores, y destacó que “No hay un mejor trinomio, más exitoso, que aquel que puede formar una buena administración, una buena inversión y una buena producción”.

VA MI RESTO.- Muy atinado, sin duda, el acuerdo logrado en los sectores obrero y empresarial para otorgar un aumento de dos dígitos al salario mínimo, ahora solo hay que cuidar en el sector productivo que no haya aumentos en los precios de la tortilla o las gasolinas, y si eso sucede, entonces si la clase trabajadora estará en condiciones de invitar a las piñatas a sus próximos festejos navideños. A ver, y hasta ahí porque como veo doy.

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